miércoles, 29 de febrero de 2012

LUCES ROJAS: El poder de los incrédulos

Rodrigo Cortés, tras celebrar su propio entierro por todo lo alto, demuestra lo bien que se desenvuelve en los exteriores, en movimiento, y dirigiendo a semejantes actores: Cillian Murphy, Sigourney Weaver, Elisabeth Olsen y, la guinda del pastel, Robert DeNiro. Este cast y el talento natural del gallego conforman una obra irremediablemente entretenida y cuya reflexión invade la mente del espectador de principio a fin.


Luces Rojas es, a simple vista, un thriller con tintes sobrenaturales con un reparto envidiable. Empezamos bien. Además, está dirigida por un español. Orgullo.
Esta cinta es una muestra de cómo un director de cine crece a base de trabajo duro y buenas ideas.

Es posible que su Buried fuera una gran idea, y Luces Rojas sólo una buena idea. Sin embargo, lo que las distingue son sus dificultades de rodaje, cada una por motivos distintos y nada comparables. El único punto en común que se les puede encontrar es que este cineasta no tiene, al parecer, ninguna intención de que el espectador esté tranquilo. Busca removerlo, inquietarlo; busca zarandear las creencias y los límites de la razón.

La trama de Luces Rojas entra en la cabeza de cualquiera y se acomoda, mientras uno se va volviendo un poco más loco. En definitiva, vincula directamente al público con su protagonista (Murphy).

A ratos esta película recuerda, sobre todo en su uso de la banda sonora, a la realización de películas como Shutter Island (Martin Scorsese, 2010). Tal vez suene aventurado, pero estas películas que manejan la mente del espectador como vehículo para desarrollar la trama, suelen tener algún punto común; como puede ser, en este caso la música, compuesta por Víctor Reyes. La música acompaña al personaje, a lo que éste lleva dentro, a sus sentimientos, al miedo, a la incertidumbre o al descubrimiento de algo sorprendente.

Cortés va camino de convertirse en un autor de género de los buenos, de los que controlan la situación, pero deja que las emociones en el espectador vayan a su aire, encontrándose cada una a su tiempo. Así es como se disfruta más de esta película.

No podemos, además, sino alabar la labor actoral. Weaver, a la que echábamos de menos en un papel como éste, a su medida, se establece como un monumento erguido y firme, que se identifica con la parte más racional de nuestro entendimiento. Murphy trabaja duro en la pantalla, no descansa, uno acaba exhausto de seguirle pero se ve abocado a ello, es imposible no tratar de descrifrar lo que sus enormes e intensos iris azules buscan. Y DeNiro, con esa media sonrisa que cabrea al personal, que lo confunde y que engrandece la película.

Realizar una película como ésta requiere de una serie de esfuerzos a la hora de escribir el guión, como es por ejemplo, no saltarse nada. Esto es, que se debe procurar no desvelar el final. No adelantar los puntos de giro, mandar señales al espectador extremadamente discretas, pero suficientemente visibles como para que al terminar la historia, uno las recuerde. A todo ello, le damos el visto bueno. Siempre habrá quienes descifren al final antes de tiempo, eso no se puede evitar.

El "pero" hemos de ponérselo allá por el comienzo de la segunda mitad, cuando tal vez los acontecimientos se retuerzan con demasiada violencia, demasiado seguidos, como agolpados. Como si al personaje de Cillian Murphy le entrasen las prisas. En cualquier caso, es todo un asunto de percepción, de cuestionar las capacidades del público. A algunos esta prisa les vendrá bien para terminar de involucrarse con la trama, y a otros les descolocará. Impredecible.

Rodrigo Cortés puede sentirse muy orgulloso se su tercer trabajo. Todas sus películas hasta el momento están requiriendo de una habilidad especial para llevarse a cabo. Ninguna historia es más fácil que la otra. Y él sigue evolucionando. Como guionista y como director. También en su otra faceta, la de montador. En esta película, uno no puede dejar de disfrutar del montaje, cuyo principal adjetivo es "inteligente". Junta las imágenes de una forma muy inteligente, muy intuitiva y nada sencilla, pero precisa.

Luces Rojas es un orgullo para el género. Rescata el lado menos malo de Murphy, al que se le recuerda fácilmente por su Espantapájaros en Batman Begins. Devuelve a Sigourney Weaver al lugar que le corresponde, deja que Elisabeth Olsen (Martha Marcy May Marlene, 2012) reluzca un poco más y ofrece a DeNiro un papel divertido y oscuro que todos queríamos ver.

Lo importante, es que te crees lo que ves.

Lo mejor: Entretenimiento y realización impecables.
Lo peor: Puede que el final resulte confuso en cuanto a la revelación.

Nota: 7.5

martes, 28 de febrero de 2012

Una aventura extraordinaria: UN SUSPIRO A MEDIAS

Hollywood, cada cierto tiempo, envía a todo el mundo mensajes reconciliadores. O nos enseña cuán capaces fueron ellos mismos de reconciliarse los unos con los otros y hasta con los países enemigos. Una aventura extraordinaria parte de la idea de que para salir a flote, las personas han de estar unidas. Un discurso fácil y poco elaborado, con una doble moral muy poco explotada.

Esta historia, llevada a la pantalla por Ken Kwapis, busca sobre todo la ternura entre el público. No es apta para mentes frías y despiadas. La razón no entró en juego ni a la hora de llevar a cabo el rescate de estos tres mamíferos, ni entre los mamíferos que elaboraron el enfoque de la película.

Drew Barrymore lleva a cabo su personaje más reivindicativo y pasteloso al mismo tiempo. El contrapunto lo pone John Krasinski (conocido por la serie The Office), ese actor al que siempre le dan papeles de tipo normalucho tirando a soso, con momentos de lucidez emocional y cierta topeza en materia de sentimientos.
Juntos forman una pareja más pensada para una comedia romántica que para este tipo de cine, no fácilmente catalogable.

No es que la anécdota carezca de jugo, es que el planteamiento podía haber sido otro. Podría haberse llevado a lugares menos comunes, profundizando más en las consecuencias políticas que supuso al tener que pedir, los Estados Unidos, ayuda a los soviéticos; entrar un poco más en el funcionamiento y movimiento de Green Peace. En fin, haber realizado una película menos ñoña de la que nos han presentado.

Una aventura extraordinaria pretende ser de esas películas que se incluyen en lo que ya es casi un género en sí mismo: "para toda la familia". Realmente, lo que esta etiqueta, en este caso, pretende decir, es que los niños disfrutarán con ella, y se implicaran al 100%; sin embargo, los adultos tratarán de encontrar algo que les llame verdaderamente la atención, probablemente sin éxito.

De sobra sabemos que Kwapis no es de los que se complican la vida; de los que arriesgan con producciones de muy distintas temáticas y puntos de vista. Esta cinta es la salida fácil que la Industria da a esta historia; no obstante, tal sobredosis de humanitarismo y solidaridad llega a chirriar. No porque el mundo no pueda ser un lugar maravilloso lleno de gente buena, sino porque en pantalla hay que cuidarse mucho de no edulcorar las tramas. Buscar la lágrima fácil es sinónimo de fracaso. El público no es tonto, aunque pueda hacérselo. Mostrar, sin guardarse ningún as en la manga, a un malo egoísta y ambicioso; y no aguantar ni 5 minutos de la película haciendo que es espectador crea que verdaderamente pueda ser malo, es un error de principiante. Un error que hace que el interés caiga de manera estrepitosa al poco tiempo de arrancar la película.

Es posible que el final levante un poco los ánimos, para no ser tan duros. El paisaje acompaña y el ritmo de la película se vuelve más intenso, menos plácido, y la impaciencia se convierte en algo positivo, con tal de saber cómo acaba esta historia de amor a la naturaleza.

La incapacidad por terminar de empatizar con ninguno de los personajes hace que uno salga del cine con las expectativas muy mal cumplidas. Salvando ciertos detalles de la fotografía, firmada por John Bailey, y por el logro de los efectos especiales (el trío de ballenas está bastante bien conseguido); técnicamente no es una película nada destacable. Y si en este aspecto no es destacable, y no nos terminamos de creer el enfoque de la historia, el resultado es que este film pasa sin pena ni gloria por nuestra memoria cinematográfica.

Lo mejor: La secuencia de Barrymore bajo el agua con las ballenas
Lo peor: No terminar de involucrarse en la historia, dada su ñoñería / No sacar más partido a la doble moral implícita en el rescate

Nota: 4





domingo, 26 de febrero de 2012

Premios OSCAR 2012. El prestigioso triunfo de THE ARTIST, el técnico de HUGO


La gran ganadora de esta 84 Edición de los Oscar ha sido The Artist. Ya lo predijimos esta misma tarde. No es para menos. La francesa innova mirando al pasado. Divierte y luce unos planos, una música y unas interpretaciones inmejorables.

Sin embargo, lo es por llevarse los llamados "premios gordos", puesto que comparte número de galardones con Hugo (Martin Scorsese), 5 en total.

Una gala bastante
lineal, nada destacable excepto ciertos momentos como:

· Nada acertado el peinado de Penélope Cruz.
·Los míticos sketch de Billy Cristal metiéndose en las películas.
·Espectacular el Circo del Sol.
·La elegancia de Gwyneth Paltrow y el buen aspecto de Robert Downey Jr.
·Sorpresa con Millenium en mejor montaje: es muy raro que este premio no se lo lleve una de las nominadas a mejor película.
· Graciosa, elegante y muy espontánea: EMMA STONE.
· Enérgico Jean Dujardin
· El éxito del cine europeo en Hollywood. Podemos.
· La preciosa y emotiva dedicatoria de Hazanavicius a su mujer, Berenice Bejo, al ganar el Oscar a la Mejor Película.
· Meryl Streep despidiéndose de los Oscar, aunque aún tiene mucha carrera por delante. Aún así, tener en su haber 3 Oscar, es decir mucho.
· Poca sorpresa en esta gala 2012.

[fotos: elpais.com]


LISTA DE TODOS LOS GANADORES

Mejor Película: THE ARTIST
Mejor Director: Michel Hazanavicius (The Artist)
Mejor Actor: Jean Dujardin (The Artist)
Mejor Actriz: Meryl Streep (La Dama de Hierro)
Mejor Actriz de Reparto: Octavia Spencer (Criadas y Señoras)
Mejor Actor de Reparto: Christopher Plummer (Beginners)
Mejor Guión Adaptado: Alexander Payne, Nat Faxon, Jim Rash (Los Descendientes)
Mejor Guión Original: Woody Allen (Midnight in Paris)
Mejor Fotografía: Hugo
Mejor Dirección Artística: Hugo
Mejor Vestuario: The Artist
Mejor Maquillaje/Peluquería: La Dama de Hierro
Mejor Película de Habla no Inglesa: Nader y Simin: Una separación
Mejor Montaje: Millenium: Los hombres que no amaban a las mujeres
Mejor Sonido: Hugo
Mejor Edición de Sonido: Hugo
Mejor Documental: Undefeated
Mejor Película de Animación: Rango
Mejores Efectos Visuales: Hugo
Mejor Música: Ludovic Bource (The Artist)
Mejor Canción Original: Man or Muppet, de Bret MacKenzie (The Muppets)
Mejor Cortometraje: The Shore
Mejor Cortometraje Documental: Saving Face
Mejor Cortometraje de Animación: The fantastic flying books of Mr. Morris Lessmore

Quiniela para los OSCAR 2012

Ya publicamos hace unas semanas los nominados a los Premios Oscar 2012, así que lo que toca en un día como el de hoy es hacer la quiniela correspondiente. Aquí os contamos las apuestas de VOLTIO.

MEJOR PELÍCULA: The Artist

DIRECTOR: Michel Hazanavicius (The Artist)

MEJOR GUIÓN ORIGINAL: The Artist

MEJOR GUIÓN ADAPTADO: La invención de Hugo

ACTOR PRINCIPAL: Jean Dujardin (The Artist)

ACTOR DE REPARTO: Christopher Plummer (Beginners)

ACTRIZ PRINCIPAL: Michelle Williams (My week with Marilyn)

ACTRIZ DE REPARTO: Octavia Spencer (Criadas y señoras)

PELÍCULA ANIMADA: Rango

DIRECCIÓN ARTÍSTICA: La invención de Hugo

FOTOGRAFÍA: The Artist

DISEÑO DE VESTUARIO: Jane Eyre

DOCUMENTAL: Pina

CORTOMETRAJE DOCUMENTAL: The Barber of Birmingham: Foot Soldier of the Civil Rights Movement

MONTAJE: La invención de Hugo

MEJOR PELÍCULA EN LENGUA NO INGLESA: Nader y Simin: Una separación

MAQUILLAJE: Albert Nobbs

BANDA SONORA ORIGINAL: Ludovic Bource (The Artist)

CANCIÓN ORIGINAL: Real in Rio (Rio)

CORTOMETRAJE ANIMADO: Wild Life

CORTOMETRAJE: The Shore

SONIDO: La invención de Hugo

EDICIÓN DE SONIDO: La invención de Hugo

EFECTOS VISUALES: La invención de Hugo

miércoles, 22 de febrero de 2012

MY WEEK WITH MARILYN: La tentación de quien la mira


Simon Curtis dirige un guión adaptado por Adrian Hodges desde el mismísimo diario de Colin Clark, un joven inglés que disfrutó de ciertos momentos íntimos con la diva Marilyn Monroe durante el rodaje de El Príncipe y la Corista en el 1947. Como aquella historia, esta película no pasa inadvertida para nadie.

Curtis debuta de la mejor manera posible y rodeado de estrellas: Michelle Williams es Marilyn, Kenneth Branagh, sir Lawrence Olivier, y Judi Dench es Sybil Thorndike. Sin embargo, el protagonista es un joven poco conocido para el cine: Eddie Redmayne, modelo habitual de marcas tan inglesas como Burberry.

Esta película refleja, por fin, el ambiente en el que Monroe se desenvolvió en el momento más álgido de su carrera. Paradójicamente, al tiempo que la actriz tocaba con las manos bien abiertas el cielo del celuloide, tocaba también la realidad más cruda de su vida. Altibajos emocionales causados por el amor superficial que los hombres profesaban por ella, inseguridad casi al 100% en cada toma que rodaba y que hacían de ella un despojo adicto a los tranquilizantes, sin los que no era capaz de sobrellevar todas estas presiones.

No obstante, el protagonista de esta historia arranca el motor de la trama mostrando al espectador su verdadero amor: el cine.
Tal vez resulte ñoña esta reflexión, pero es el amor al cine el trasfondo de esta aventura recomendada sobre todo a entusiastas y románticos convencidos.

Las aspiraciones de Colin (Redmayne) necesitan alimento. Al principio, basta con trabajar en una película con Lawrence Olivier; sin embargo, necesita más, y como si tuviera poco, Marilyn Monroe se presenta ante él como una diosa demasiado humana a la que tenderle una mano, un hombro y el corazón entero si le hiciera falta. El problema era que acercarse a la Monroe, era como acercarse a una sirena: te atrae con su belleza, con sus cantos, pero te arrastra al fondo del mar, de donde ya no se puede salir.

La bien conocida por todos Emma Watson (Hermione en la saga Harry Potter) hace su papel de secundaria, por fin ya vista como una acriz adulta y con una buena dosis de carácter en pantalla, esperando que el joven Clark se desengañe y dé una oportunidad a su posible noviazgo. Se muestra paciente, serena; Watson se mantiene al margen y aprovecha el papel que le han dado. Ya le llegará la hora de interpretar algo tan magnífico como lo que se le ha presentado a Michelle Williams. Tiempo al tiempo.

Así, podemos establecer un recorrido por estos actores que hacen de My week with Marilyn una película inmensa. Kenneth Branagh, nacido para interpretar personajes míticos, ya sean literarios o reales; Judi Dench, que casi encuentra en el personaje de Sybil su alter ego de aquí a 50 años. Todos ellos participan, dan su perfecta clase de interpretación, y se quedan en la retina del espectador quietos, inmóviles, dejando que se disfrute su trabajo con intensidad y permanencia.

Williams hace el papel clave de su carrera hasta ahora. Se lo lleva mereciendo años, esperando en la sombra, haciendo mejores producciones en las que el protagonismo recaía sobre sus compañeros de reparto, como Blue Valentine, Brokeback Mountain o Shutter Island.
Ver a esta actriz interpretar a Marilyn Monroe es un ejemplo de lo que el cine debe suponer. La transformación es total. Uno se olvida de la actriz actual y pone voz, gestos, miradas y acento a ese mito imperecedero. La tentación rubia. Nos transporta hasta 1947, a la admiración que el mundo entero sentía por su personaje. Ilumina cada escena en la que aparece (bravo por el director de fotografía, por otro lado), enamora a los asistentes dentro y fuera de la pantalla y, sin embargo, se vuelve humana y nos hace partícipes de sus equivocaciones, nos arrastra hasta allí. Pero uno no puede dejar de mirarla todo el tiempo que está frente a nosotros.
No hay alabanzas suficientes para Michelle Williams.

Esta cinta se vuelve imprescindible no sólo por el valor de su reparto, sino porque en conjunto con los detalles técnicos forma un todo sólido, compacto y reluciente. La fotografía, como he dicho, es impecable; hecha a medida de la actriz, de sus movimientos, de su maquillaje. A medida también de la mirada entusiasta e ilusionada que Eddie Redmayne lanza plano a plano.

Curtis hace una película grande, con gracia, frescura y elegancia. Saca lo mejor y lo peor de cada personaje. Consigue plasmar la belleza de lo sensual y lo decrépito, en una balanza con pesos exactos. My week with Marilyn es, por supuesto, una película tremendamente entretenida, fuera de todo este análisis. Adecuada para cualquiera, fans y no fans del mito que esconde una historia como ésta.

Dios salve a la Reina Streep, pero si Marilyn Monroe levantara la cabeza, el Oscar sería indudablemente para Michelle Williams.

Lo mejor: Olvidar que la actriz a la que ve en pantalla es, en realidad, Michelle Williams.
Lo peor: No otorgar más garra al personaje de Arthur Miller.

Nota: 9.5

domingo, 19 de febrero de 2012

PREMIOS GOYA: TODOS LOS GANADORES

La gala de los Premios Goya 2012 ha resultado poco sorprendente. Ninguna película dio la campanada, como sucedió en la pasada edición con Pa Negre; ni se ha visto teñida por discursos político-reivindicativos (excepto el de Isabel Coixet, y aún así, era de esperar). A Eva Hache, en su papel de presentadora, le damos el aprobado; la actuación de Buenafuente en la pasada gala es casi insuperable.
La ganadora de la noche: No habrá paz para los malvados (Enrique Urbizu).


·Momentos emocionantes:

- La re
aparición de Silvia Abascal, tras haberlo pasado francamente mal al sufrir un ictus.
-El discurso de Elena Anaya, lleno de emoción y amor: al cine y a su familia, amigos y pareja.
-El discurso de Kike Maillo, con una especial dedicatoria a Claudia Vega, a la que hizo prometer que estudiaría y llegaría hasta donde ella quisiese.
- Es digno de destacar también el momento estelar de Santiago Segura. Imposible no reír con la inteligencia cómica del director de la saga Torrente.


·Momentos fríos:

- Las intrusiones de los típicos espontáneos, que vulneran la seguridad de la gala a placer.
- El discurso del Presidente y Vicepresidentas de la Academia de Cine; en particular,la parte correspondiente a González Macho, que le ha dado la vuelta al de Álex de la Iglesia en 2011. Las palabras de De la Iglesia fueron justas, precisas, honestas y muy sensatas. El discurso 2012 ha sido más palabrería y menos realidad.
- Las ganas de Isabel Coixet por hacerse notar y romper con la tranquilidad política que, extrañamente, ha reinado durante toda la gala. Claro está, también, que ganando el documental que ha ganado, tenía su lógica.
- El rap, más aburrido que otra cosa, protagonizado por El Langui, un tipo simpático como él sólo (eso sí).
-El trabalenguas con el que se ha encontrado Nadia de Santiago al leer el nombre del director de The Artist (Michel Hazanavicius)

[Para los detalles de los mejores vestidos, podéis echar un ojo al blog ElCuervoGarcía, donde hacen una estupenda crónica sobre la moda de la alfombra roja]

·LISTA DE TODOS LOS GANADORES:


MEJOR PELÍCULA

No habrá paz para los malvados (Enrique Urbizu)
Blackthorn: Sin destino (Mateo Gil)
La piel que habito (Pedro Almodóvar)
La voz dormida (Benito Zambrano)

MEJOR DIRECTOR
Enrique Urbizu (No habrá paz para los malvados)
Mateo Gil (Blackthorn: Sin destino)
Pedro Almodóvar (La piel que habito)
Benito Zambrano (La voz dormida)

MEJOR GUIÓN
Miguel Barros (Blackthorn: Sin destino)
Martí Roca, Sergi Belbel, Cristina Clemente y Aintza Serra (Eva)
Enrique Urbizu y Michel Gaztambide (No habrá paz para los malvados)
Woody Allen (Midnight in Paris)

MEJOR GUIÓN ADAPTADO
Ángel Cruz, Ignacio Ferreras, Paco Roca y Rosanna Cecchini (Arrugas)
Icíar Bollaín (Katmandú: Un espejo en el cielo)
Pedro Almodóvar (La piel que habito)
Benito Zambrano e Ignacio del Moral (La voz dormida)

MEJOR DIRECTOR NOVEL
Kike Maillo (Eva)
Paula Ortiz (De tu ventana a la mía)
Paco Arango (Maktub)
Eduardo Chapero Jackson (Verbo)

MEJOR ACTOR PROTAGONISTA
José Coronado (No habrá paz para los malvados)
Antonio Banderas (La piel que habito)
Daniel Bruhl (Eva)
Luis Tosar (Mientras duermes)

MEJOR ACTRIZ PROTAGONISTA
Elena Anaya (La piel que habito)
Salma Hayek (La chispa de la vida)
Inma Cuesta (La voz dormida)
Verónica Echegui (Katmandú: Un espejo en el cielo)

MEJOR ACTOR DE REPARTO
Juan Diego (23-F)
Raúl Arévalo (Primos)
Juanjo Artero (No habrá paz para los malvados)
Lluís Homar (Eva)

MEJOR ACTRIZ DE REPARTO
Maribel Verdú (De tu ventana a la mía)
Ana Wagener (La voz dormida)
Pilar López de Ayala (Intruders)
Goya Toledo (Maktub)

MEJOR ACTRIZ REVELACIÓN
María León (La voz dormida)
Blanca Suárez (La piel que habito)
Michelle Jenner (No tengas miego)
Alba García (Verbo)

MEJOR ACTOR REVELACIÓN
José Mota (La chispa de la vida)
Jan Cornet (La piel que habito)
Marc Clotet (La voz dormida)
Adrián Lastra (Primos)

MEJOR MÚSICA ORIGINAL
Lucio Godoy (Blackthorn: Sin destino)
Evgueni Galperine y Sacha Galperine (Eva)
Alberto Iglesias (La piel que habito)
Mario de Benito (No habrá paz para los malvados)

MEJOR CANCIÓN ORIGINAL
Debajo del limón (La voz dormida)
Nana de la hierbabuena (La voz dormida)
Nuestra playa eres tú (Maktub)
Verbo (Verbo)

MEJOR DIRECCIÓN DE PRODUCCIÓN
Andrés Santana (Blackthorn: Sin destino)
Toni Carrizosa (Eva)
Toni Novella (La piel que habito)
Paloma Molina (No habrá paz para los malvados)

MEJOR FOTOGRAFÍA
Juan Antonio Ruiz Anchía (Blackthorn: Sin destino)
Arnau Valls Colomer (Eva)
José Luis Alcaine (La piel que habito)
Unax Mendía (No habrá paz para los malvados)

MEJOR DIRECCIÓN ARTÍSTICA
Juan Pedro de Gaspar (Blackthorn: Sin destino)
Laia Colet (Eva)
Antxón Gómez (La piel que habito)
Antón Laguna (No habrá paz para los malvados)

MEJOR MONTAJE
David Gallart (Blackthorn: Sin destino)
Elena Ruiz (Eva)
José Salcedo (La piel que habito)
Pablo Blanco (No habrá paz para los malvados)

MEJOR DISEÑO DE VESTUARIO
Clara Bilbao (Blackthorn: Sin destino)
Paco Delgado (La piel que habito)
MªJosé Iglesias (La voz dormida)
Patricia Monné (No habrá paz para los malvados)

MEJOR SONIDO
Daniel Fontrodona, Marc Orts y Fabiola Ordoy (Blackthorn: Sin destino)
Rossinyol, Tarragó y Orts (Eva)
Iván Marín, Marc Orts y Pelayo Gutiérrez (La piel que habito)
Licio Marcos de Oliveira, Ignacio Royo-Villanova (No habrá paz para los malvados)

MEJOR MAQUILLAJE/PELUQUERÍA
Ana López-Puigcerver y Belén López-Puigcerver (Blackthorn: Sin destino)
Concha Rodríguez y Jesús Martos (Eva)
Karmele Soler, David Martí y Manolo Carretero (La piel que habito)
Montse Boqueras, Nacho Díaz y Sergio Pérez (No habrá paz para los malvados)

MEJORES EFECTOS ESPECIALES
Arturo Balseiro y Lluis Castells (Eva)
Raúl Romanillos y David Heras (Intruders)
Reyes Abades y Eduardo Díaz (La piel que habito)
Raúl Romanillos y Chema Remacha (No habrá paz para los malvados)

MEJOR DOCUMENTAL
Treinta años de oscuridad
Morente
Escuchando al juez Garzón
Cuadernos de barro

MEJOR PELÍCULA DE ANIMACIÓN
Arrugas
Cartago Nova
Papá soy una zombie
The little wisher

MEJOR PELÍCULA IBEROAMERICANA
Boleto al Paraíso-Cuba
Miss Bala-México
Un cuento chino-Argentina
Violeta se fue a los cielos-Chile

MEJOR PELÍCULA EUROPEA
Jane Ayre-Reino Unido
Melancholia-Dinamarca
The Artist-Francia
Un dios salvaje-Francia

MEJOR CORTOMETRAJE DE FICCIÓN
El barco pirata
El premio
Matar a un niño
Meine Liebe

MEJOR CORTOMETRAJE DOCUMENTAL
Alma
Nuevos tiempos
Regreso a Viridiana
Virgen Negra

MEJOR CORTOMETRAJE DE ANIMACIÓN
Birdboy
Ella
Quién aguanta más
Rosa
GOYA DE HONOR: Josefina Molina

jueves, 16 de febrero de 2012

INTOCABLE: La incansable carrera de la vida

Francia envía un regalo al mundo en forma de comedia. Eric Toledado y Olivier Nakache presentan Intocable, y no puede llegar en mejor momento. La historia de un tetrapléjico que da, tal vez, su primera oportunidad a un muchacho negro sin muchas expectativas en la vida.

La trama, a priori, podría parecer típicamente lacrimógena: en estos momentos de crisis mundial, una película europea propone a un tetrapléjico millonario que contrata a un joven y pobre chico de origen senegalés, que vive en una barriada de París, para que aprenda a trabajar y se enseñen los verdaderos valores de la vida mutuamente.

Sin embargo, y aquí está lo grande de esta cinta, es que aunque ésta sea la historia, no es así el planteamiento de la película. Aunque sus raíces son profundas y la reflexión también, la materia esencial de Intocable (Intouchables, en original) es la comedia y el dibujo de los personajes.
Es imposible no verse reconocido en Driss (Omar Sy); es imposible no reír con la espontaneidad de este personaje, con sus salidas de tono siempre en el momento que parece más políticamente incorrecto, pero más adecuado para que es espectador se enternezca y se divierta a partes iguales.

François Cruzet, por su lado, luce magnífico como tetrapléjico. Por qué no. Lo magnífico de su actuación no es lo más o menos lograda que esté su parálisis, sino la serenidad de su interpretación. Equilibrado, cómico dentro de la serenidad, elegante, discreto. Como si dejase hacer al personaje a su aire, dándole espacio y tiempo.
Ambos protagonistas se complementan y engrandecen al mismo ritmo, rodeados de uno secundarios de primera; en este caso, secundarias: Anne Le Ny y Audrey Fleurot, la primera, vista recientemente en Declaración de Guerra (Valerie Donzelli).

Toledano y Nakache consiguen que uno se vuelva más amable al salir del cine, harto de reír y de comprender que hasta en la peor tragedia existe una parcela reservada para ser mejor persona, para buscar otras opciones y otras salidas que no sean salir corriendo o ahogarse irremediablemente. Logran, además, una narrativa que fluye a la perfección; sin momentos más lentos unos que otros; una fotografía bien conseguida, sin grandes pretensiones, y unas secuencias dramáticas, principalmente protagonizadas en el inicio por Sy, que equilibran la realidad tan cruda de su personaje, con las humildes aspiraciones (pero aspiraciones, al fin y al cabo) que demuestra tener finalmente.

Tal vez uno destile cursilería al salir de ver este film, pero ver semejante derroche de talento transformado en guión cinematográfico, con tales matices cómicos sustentados, únicamente, en comprender la complejidad o la sencillez de dos personas radicalmente distintas al primer vistazo, pero con una capacidad de retroalimentarse tan fluida que parece que viniesen de lugares idénticos; la verdad, no es para quedarse corto en halagos hacia estos directores y estos actores. No sería justo para una película que no puede hacer daño a nadie y que se esfuerza de este modo en hacernos sentir un poco mejor.

Ludovico Einaudi pone la música con un tema principal intenso, pero que al primer contacto logra una conexión imagen-espectador fortísma. Temas de Earth Wind and Fire, Chopin, Bach y hasta de Nina Simone, componen una banda sonora que define, como principal objetivo, a los dos personajes; mostrando así sus diferencias y, del mismo modo, sus similitudes.

No es por nada que sea la película más taquillera del año en Francia y la sexta más taquillera en la historia del cine de nuestro país vecino.
Este arte demuestra una vez más que es capaz de superar los prejuicios y las quejas de los espectadores. Vean más cine europeo, amigos. Vean este cine tan francés y tan universal. Todos necesitamos una primera oportunidad.

Lo mejor: tantos momentos memorables / la debilidad de las extremidades auditivas de Philippe
Lo peor: ?

Nota: 9.5
Estreno: 9 de marzo




martes, 14 de febrero de 2012

ALMODÓVAR ya tiene nuevo proyecto: LOS AMANTES PASAJEROS

Tras la noticia de su BAFTA a la Mejor Película de Habla No Inglesa por La Piel que Habito, Pedro Almodóvar deja caer la idea de su nueva cinta:
Los Amantes Pasajeros.


Al parecer, se empezará a rodar en junio y será una "comedia coral un poco picante" al estilo de Mujeres al borde de un ataque de nervios.
Esta película tenía prevista su realización hace ya unos dos años, pero el guión de La Piel que Habito se interpuso, con éxito al menos.

Según dijo el propio director al periodista Gregorio Belinchón (El País), el protagonista de este film podría ser Javier Cámara; aunque, pensándolo bien, mejor no decirlo muy alto por si al final se decanta por otro actor y ya le hemos dado falsas esperanzas a Cámara.

Agustín Almodóvar también habló sobre la ya imposible representación de La Piel que Habito en los Oscar. El productor mostró su disgusto porque Pa Negre no superase la última criba, aunque apuntó también que tal vez su película hubiera jugado un buen papel representando a España en estos premios.

Al fin y al cabo, los BAFTA son una predicción. normalmente bien acertada, de los Oscar. Otro año será.

lunes, 13 de febrero de 2012

crítica express. INFIERNO BLANCO.

- No estaría de más que el director se hubiera molestado en meter al espectador, un poco al menos, en contexto. ¿Quién es el personaje? ¿Cuál es su profesión? ¿Cuál es su drama inicial? ¿Dónde vive? ¿De qué conoce a sus compañeros de historia? Así, suma y sigue, las preguntas con las que uno sale del cine tras ver Infierno Blanco.

- Liam Neeson no se enfrenta, tampoco, al papel de su vida. Esto es, que con mostrar un poco de angustia interna, basta para interpretar al protagonista. En cualquier caso, el actor norirlandés cumple.

- Los efectos especiales son bastante mejorables, así como la creación de los lobos.

- Los estereotipados compañeros de reparto de Neeson. Unos personajes previsibles, con unos carácteres muy manidos en la gran pantalla.

- Desde casi el principio de la película uno sabe que ésta seguirá la premisa del "sólo puede quedar uno". Partiendo de esta base, la trama deja de interesar.

- El estruendoso diseño de sonido, protagonista fundamental de esta cinta. Parece que toda la película girase en torno al próximo ruido infernal (nunca mejor dicho) que vaya a aparecer. Desagradable e innecesario, dentro de una historia a la que se le podría haber sacado mucho más jugo si se hubiesen respondido a las preguntas planteadas en el primer punto de esta crítica.

- El final consigue levantar ligeramente este film de Joe Carnahan que, aunque busca mostrar la debilidad humana, el instinto de supervivencia e, incluso, la fragilidad de la mente, no consigue hacer que uno se emocione.

- Tal vez los amantes de las películas del género de acción con tintes de supervivencia disfruten con ella; para el resto, pasará sin pena ni gloria.

Lo mejor: la muerte de alguno de ellos, algo epifánica.
Lo peor: el sonido, excesivo
Nota: 4

jueves, 9 de febrero de 2012

Shame. EN CONSTANTE HUIDA HACIA DENTRO

Steve McQueen equilibra con destreza la vergüenza ajena con la compasión. La necesidad con la adicción. La estabilidad con la inestabilidad. Eso es Shame.

Uno no acierta a buscarle pegas a este film; no formalmente, al menos. Michael Fassbender vuelve a entregarse a una historia cruda, sórdida y sorprendentemente elegante. Su papel protagonista lo magnifica, tal y como venimos oyendo todos estos meses durante este 2011. No es que estén sabiendo venderle, es que ha tenido la suerte de quien, sin pretenderlo, recibe unos papeles que pueden engrandecer a un actor. Ya sucedió en la ópera prima de McQueen, Hunger, en la que desbordó las emociones que llevaba implícitas su personaje.

Shame es la historia de un adicto al sexo que busca tanto saciarse, como encontrar una salida a su vicio. Al fin y al cabo, busca lo que todos, y no es la felicidad (que da por perdida, casi como todos); se trata de llevar su vida a su manera, sin molestar a nadie, sin responsabilidades, cumpliendo unos horarios, controlando -de la única forma que sabe- sus instintos. Esta única forma es liberándolos, sin sentir demasiada sorna de sí mismo.

Así llegamos a Carey Mulligan en el papel de la hermana de Brandon, el protagonista. Sin este personaje la película perdería hasta su propio título. Steve McQueen dota a Sissy de un vulgar misticismo que hace de ella un ser humano asombroso. La envuelve, en una de las mejores escenas, de planos cortos y primeros planos que parecen acariciarla mientras canta una versión imposible del New York, New York de Sinatra.

Este personaje provoca en Fassbender una inestabilidad casi insoportable, a la vez que hace de él un hombre siniestro, aunque de una carne y un hueso que no puede resistir odiar y cuidar de su hermana como cualquier otro. Esta es otra de las dualidades que, mirando bien, pueden apreciarse en la trama. Visto queda en la brutal escena, intensa como pocas las que se hayan visto nunca, en la que ambos hermanos conversan sin dejar de mirarse. Atentos a ella. Eso es lo que se llama: hacer un espectacular duelo de interpretaciones.

El director gusta de los planos largos, larguísimos e increíblemente narrativos. Se deshace de las palabras y deja que la cámara cuente más que los protagonistas. Así es como vemos el saber hacer de McQueen. Vemos cómo Brandon (Fassbender) devora como un auténtico animal sin escrúpulos a la que puede ser una de las víctimas de su adicción en un vagón de metro, en su oficina, en la calle. Allá donde pueda encontrar algo de placer con el que llenar sus vacíos.

Estas son las películas que se hacen valer por sí mismas. Aquellas en las que la imagen que vemos en pantalla cuenta más de la historia que el guión escrito. En esta cinta los detalles se convierten en grandes pensamientos de los personajes. Esta película nunca descansa, como su protagonista, incapaz de salir del lugar donde se ha ido a perder.

La grandeza de los personajes es que no son un hombre y una mujer fríos, sino todo lo contrario; no obstante, sus necesidades, sus defectos y carencias, hacen de ellos seres miserables, sin salida, al borde del abismo. Extremos, en un mundo consumido por rutinas, oficinas, faldas y braguetas.

Si a todo esto decimos que le acompaña una BSO espléndida y muy descriptiva, firmada por Harry Escott, la fórmula no puede sino ser de éxito.

Para ver Shame hay que limpiarse muy bien la conciencia, no ir con los prejuicios como compañeros de butaca. Ya se encargará McQueen por su lado, y Fassbender y Mulligan imponentes e imparables actores, por el suyo, de establecer las preguntas y tal vez, si sabe mirar bien, las respuestas.

Lo mejor: Fassbender+Mulligan / La sucia elegancia que envuelve toda la película
Lo peor: Querer adivinar todo el tiempo lo que el protagonista va a hacer, cómo va reaccionar / Uno intenta solucionar los problemas del protagonista más que él mismo

Nota: 9.5
(foto: ante la incapacidad por escoger uno sólo de los carteles que existen para la película, proponemos juntar algunos de ellos para vuestro disfrute)


miércoles, 8 de febrero de 2012

Declaración de Guerra. Primera persona del plural, verbo RESISTIR

El cine europeo golpea de nuevo. Cualquiera que sea un habitual del cine del viejo continente, sabrá que éste no se identifica con los efectos especiales, con las historias de acción contadas mediante el género de acción. En Declaración de Guerra la directora nos plantea una historia de acción de verdad, sin nada que tapar ni que esconder. El final ni siquiera es importante (la película empieza con un flash forward). Lo que importa son las acciones humanas.

Valérie Donzelli es la directora, guionista y protagonista de esta película. Es quien la vivió en primera persona, pero no sólo del singular. El plural se encuentra con Jérémie Elkaïm, coguionista, protagonista y pareja en la vida real de Donzelli.
Juntos, cuentan la historia de un matrimonio joven, divertido, moderno, independiente y feliz; sin embargo, se encuentran con un obstáculo grande, enorme y hermoso: Adam, su hijo, al que le diagnostican al poco tiempo un tumor cerebral.
Cómo no iban a encontrarse con estas dificultades, sabían de su fatal destino nada más conocerse. Sus nombres son Romeo y Juliette.

Lo díficil de esta película era no caer en los tópicos que rodean cualquier trama relacionada con una enfermedad, con el añadido de que ésta recaiga sobre un niño. La directora francesa demuestra que, ante semejante situación, el peso de la historia no puede recaer (en este caso) sobre el enfermo; lo cual es un punto de partida extraordinario, hacia una reflexión mayor.

El enfoque es, como cualquier fórmula del éxito, sencillo. La premisa de una pareja moderna, en cuyos planes se cuela lo impensable, sale a relucir en la actitud con la que asumen su drama. Nadie está preparado para afrontar algo así, pero en cierto modo hemos nacido para derrotar estos problemas. Así es como asumen Romeo y Juliette la enfermedad de su hijo. Más allá de encontrar una solución moviendo cielo y tierra, está sobrevivir a todo ello; mantenerse unidos es, tal vez, el eje central de esta película, el mensaje principal. Las parejas han de cuidarse, resistir y amarse por encima de todo para coservar lo que más les importa: aquello que nace de lo mejor de ellos mismos.

Esta pareja francesa se apoya y se complementa, necesita oxig
enar su sufrimiento; comportarse a veces como los jóvenes que todavía son, salir y recordar cuál era su vida antes de todo aquello. Esto les hará no perder la objetividad. Sin embargo, el espectador es otra historia.

De primeras puede resultar extraño el hecho de ver a estos padres, mientras su hijo está en el hospital durante meses y meses, salir y divertirse, tomar copas y reír (en su justa medida) acerca de las consecuencias de la cirujía. Sin embargo, puede dar lugar a que el público tome estos actos como un exceso de despreocupación que les aparte del propósito esencial de la trama: salvar una vida.
No calculo a etiquetar este film en ningún género. Comedia dramática, se lee por ahí. No termino de atreverme con esto.
Lo que sí se puede decir es que ambas interpretaciones protagonistas, así como las de los secundarios, logran que el espectador se identifique enormemente con la situación, con las reacciones de estos personajes y con su punto de vista.

Esto es lo que es, una revisión del ser humano en su faceta más dramática. Cuando la esperanza parece menguar y se activa a golpe de abrazos y miradas de complicidad.

Ahora viene el dato curioso, si es que se le puede tildar así: Donzelli y Elkaïm vivieron un situación parecida a la de los protagonistas, puesto que también tuvieron que superar una grave enfermedad del hijo que tienen en común.
Esto fabrica una emoción inevitable plano a plano. La intensidad, la conexión entre ellos es grandísima.

Tal vez, esto mismo hace que en algún momento del metraje la espontaneidad de la escena cobre mayor significado que la escena en sí misma y, aunque paradójico, le hace perder esa credibilidad que impregna la cinta.

Tal vez los detalles técnicos tengan algo que ver. Esta película, a excepción de su escena final, está rodada con una Canon EOS, lo que a simple vista de los mortales no familiarizados con el mundillo audiovisual, no es más que una cámara de fotos. Esto les permitió rodar en un hospital de verdad, con personal sanitario real. La credibilidad asciende a niveles disparatados a través de la lente de la cámara; sin embargo, volvemos a caer en ciertos momentos en una espontaneidad tal vez más cercana al cine amateur.

En fin, que Donzelli y Elkaïm firman un guión sólido, con ciertos tintes casi mágicos y una moraleja sincera y muy adecuada a nuestro tiempo.
La idea de sacrificio, impuesta a bocajarro y que vemos crecer a medida que avanza la película, es otro de los tesoros que entraña esta historia que a ratos le hace parecer más un documental que una ficción.

Lo importante es lo que nos une. Recuérdenlo.


Lo mejor: La intensidad y credibilidad de sus personajes protagonistas / La conversación sobre las posibles secuelas de Adam / La libertad desde la que he está hecha la película
Lo peor: su BSO / el posible exceso de espontaneidad
Nota: 7

JOHN WILLIAMS cumple 80 años

Hoy, 8 de febrero de 2012, uno de los más grandes y talentosos compositores de bandas sonoras cinematográficas, cumple 80 años. Estas son algunas pinceladas sobre su biografía:

- Nació en Floral Park (NY), después se trasladó a L.A. y de ahí marchó de nuevo a NY. Su padre era percusionista de jazz.

- A los 7 años empezó a estudiar piano, a los 10 trombón y, más tarde, clarinete y trompeta.

- Estudió piano y composición en la Universidad de California y piano en la Escuela Juilliard de NY.

- En 1952 fue reclutado por la Fuerza Aérea Estadounidense, donde compuso y arregló himnos militares, entre otras labores.

-Trabajó en varios estudios de jazz de NY.

- Se ha casado dos veces (viudo de su primera mujer) y tiene 3 hijos, de los cuales, dos son músicos y una doctora.

- Tiene 5 premios Oscar y 4 Globos de Oro. Es la persona viva con más nominaciones a los Oscar (ha sido nominado 47 veces) en su categoría, y la segunda más nominada de la historia de estos premios (después de Walt Disney, con 59). John Williams es quien más veces ha competido contra sí mismo en una misma categoría.

- La BSO de Star Wars fue considera la mejor BSO de película norteamericana de todos los tiempos. La BSO de Tiburón quedó en sexta posición y la de E.T. en decimocuarta.

Este año le podremos disfrutar en la BSO de War Horse (S. Spielberg).

Aquí va una selección de las BSO firmadas por Williams, favoritas de VOLTIO.